Durante el mes de Enero programé una serie de sesiones para celebrar la PAZ. Os dejo una experiencia que disfrutamos, casi por azar, hace poquitas fechas, en la actividad de Fomento de la Lectura con los alumnos de Primero. Fue algo tan tierno y entrañable, que no pude por menos que escribir estas palabras. Espero os den una idea de lo que pasó aquella tarde en la alfombra de los cuentos. A veces, la PAZ se toca con la punta de los dedos.
Hoy convocamos a la "Fabricante de Sueños" a la alfombra de los cuentos, allá donde ocurren los prodigios.
Contamos la historia de una estrellita solitaria que vivía triste y aburrida en medio del desierto, sin un amigo a quien llevarse a los brazos. Estrellita consiguió, con la ayuda de unos amigos que fue encontrando por el camino, llegar a una fábrica muy especial, donde el sueño de un mundo lleno de aleteos de mariposas de colores y de ríos de alegría apareció ante sus ojos.
Mis niños también compartieron con la Fabricante de Sueños sus pequeños-grandes anhelos de infantes. Unos pidieron muñecas-amigas que los acompañaran a todos lados, escalar montañas de slime , pistolas para disparar palabras hermosas, dar un lindo paseo con su familia por ese mundo que Estrellita, Flor y Dragón habían recreado confiando los unos en los otros.
El pirata bueno de Juan dijo que quería ser timonel de un barco con tres chimeneas y 57 marineros. En su sueño echaba a navegar un barco-hospital en el que rescatar a todos los que huyen de las guerras . Los que estábamos reunidos en la alfombra de los cuentos, quisimos formar parte de su tripulación y nos pusimos en manos de timonel tan especial. Catalejo en mano, nos lanzamos al abordaje de las injusticias, luchando a abrazos partidos, a cañonazos de besos...¡Menudos somos los piratas!
Y remando, remando y soñando soñando, nos echamos al mar de las palabras y nos dejamos llevar por el viento, con el objetivo de surcar los Siete Mares en busca del Reino de la PAZ.
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